La dieta proteica consiste en aumentar el porcentaje de proteínas y disminuir por tanto la tasa de hidratos de carbono (glúcidos) y de grasas (lípidos). No consiste por lo tanto en eliminar por completo estos dos últimos nutrientes ya que no sería saludable y podría acarrearnos problemas. Se trata de ingerir fuentes de hidratos de carbono con un índice y carga glucémica bajita y grasas, exclusivamente saludables.
Al ingerir poca cantidad de hidratos y grasas, el organismo se ve “obligado” a funcionar con nuestras reservas quemando así los depósitos de grasa de nuestro organismo.
¿Suplementación?
Podemos usar suplementos de proteínas o tomar este nutriente exclusivamente de la alimentación. Y debido a la reducción de hidratos de carbono y, por lo tanto, de fibra a veces que necesitamos apoyarnos en suplementos que nos ayuden a ir al baño.