Come castañas: saludables y equilibradas incluso en dietas
Características del otoño y del invierno, las castañas pueden consumirse hasta el mes de febrero, y a la hora de comprarlas podemos encontrar frescas, asadas, peladas, en botes, envasadas y congeladas.
Las que son frescas tienen que tener un tamaño grandes un cuerpo apretado, que pesen, con la piel de color pardo libre de manchas y cortes, y brillantes y lustrosas.
Hasta su consumo hay que mantenerlas en lugar seco y fresco, nunca en bolsas de papel, y en el frigorífico duran hasta seis meses cuando se congelan (recuerda hacerles un pequeño corte para que cuando las vayas a asar no exploten).
Para una mejor digestión es recomendable consumir las castañas cocinadas, por ejemplo, asadas, ya que, al ser un alimento rico en taninos, si se consumen en crudo pueden producir alguna molestia intestinal. Antes de cocinarlas se pueden sumergir en agua para ver si todas están en condiciones óptimas: las que floten es mejor desecharlas ya que o están vacías o no están buenas
Entre los beneficios alimentarios de las castañas hay que señalar que son un fruto seco riquísimo en nutrientes, con alto contenido en fibra e hidratos de carbono a la vez que poseen un bajo contenido calórico (190 calorías/100 g).
Incorporan una gran cantidad de minerales, entre los que destacan: fósforo, calcio, hierro, fósforo, zinc…, con lo que que se les atribuyen propiedades anti-inflamatorias y vasculares.
Además aportan vitamina C, ácido fólico y otras vitaminas del grupo B, lo que les otorga propiedades energéticas, saciantes, prebióticas y antioxidantes.
Son muy recomendables cuando se requiere aumentar el nivel de glucosa sanguíneo de forma lenta y sostenida, como en el caso de niños y deportistas, y ello también las hace interesantes en dietas de control de peso, pues poseen un efecto saciante más duradero que ayuda a evitar el picoteo entre horas.
Respecto a la belleza, las castañas eliminan la apariencia cansada del rostro gracias a sus propiedades détox, pues la vitamina C que poseen combate los radicales libres y mejora el aspecto de la piel, a la vez que contribuye a la producción de colágeno, para una mayor elasticidad en la piel.