¿Por qué el IMC no es un dato fiable?
El Índice de Masa Corporal (IMC) sirve para calcular, en adultos, si estás por debajo de tu peso, te encuentras en el idóneo, sufres sobrepeso u obesidad. La cifra se obtiene a partir de la fórmula: peso (en Kg) divido por la altura (en m2).
Según este indicador, generalmente se considera satisfactorio un Índice de Masa Corporal que se sitúa entre 18,5 y 24,9 (20 y 24,9 en el caso de los hombres).
Si el IMC es inferior a 18,5, probablemente haya una dejadez excesiva. El sobrepeso se define como un IMC de más de 25 y se considera que una persona es obesa si su IMC es superior a 30.
Según los valores propuestos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el IMC es uno de los principales recursos para evaluar el estado nutricional.
Pero, como ocurre con todos los planteamientos generalistas, con el paso del tiempo se ha determinado que no es un valor aplicable a todos los individuos, porque cada cuerpo y cada organismo es diferente. ¿Qué quiere decir esto? Que puede suceder que una persona de constitución fuerte o con retención de líquidos tenga un IMC elevado (por encima de 30), pero no por ello presente sobrepeso. O, por el contrario, que una persona no tenga un IMC elevado y sin embargo tenga un porcentaje de grasa superior al recomendado. O que su IMC sea muy elevado porque practique deportes que aumentan la masa muscular y, por tanto, el peso.
Y es que al final de lo que se trata es de lograr las proporciones correctas, pero sobre todo de mantener la grasa a raya; el objetivo tiene que ser siempre perder peso a costa de la grasa, no del agua o la proteína, ya que al fin y al cabo el peso es una suma de grasa y no grasa.
Si pesamos más de lo que deberíamos, en relación con la talla que tenemos, no tiene por qué ser necesariamente debido a un aumento de grasa, sino que la causa puede estar en un aumento de la masa magra, que, de hecho, tiene una densidad mayor que la masa grasa.
El porcentaje de grasa corporal ideal en una mujer está entre un 20-25% y en un hombre, entre un 15-20%.
Distintos especialistas e instituciones están revisando el modo de calcular el peso correcto, si bien lo cierto es que no existe un peso ideal, sino una correcta proporción en la que influyen edad, peso, altura, contornos y masa grasa.