Las microagujas provocan cientos de microorificios por cm2. de piel a través de los cuales penetran los principios activos nanosomados aplicados obteniendo unos resultados increíbles en los tratamientos antiarrugas, reafirmantes, hidratantes, anticelulíticos…
El uso del Dermaroller por sí solo activa la producción de colágeno, elastina, etc., por la respuesta de nuestro organismo a la pequeña agresión a la que lo sometemos; Con lo que mejora la hidratación y la elasticidad cutánea reduciendo las arrugas. Si además aplicamos nanocosméticos específicos para el problema que deseamos tratar, tenemos en nuestras manos tratamientos de alta eficacia nunca alcanzada hasta ahora.
El Dermaroller puede aplicarse en cualquier parte del cuerpo, incluso en la delicada zona de alrededor de los ojos, para corregir arrugas de diversa localización y profundidad como patas de gallo, supralabiales…