Correr: más vale tarde que nunca
El running está de moda. Millones de personas lo practican por todo el mundo. Y cada vez son más los que quieren empezar a correr pero no saben cómo. El running es un deporte que engancha y que ofrece numerosos beneficios, pero que da pereza comenzar, sobre todo si te has acostumbrado a una vida sedentaria en la que el deporte y las dietas para deportistas brillan por su ausencia.
Para ser un nuevo runner sólo necesitas ponerte las deportivas, establecer un plan de entrenamiento para correr acorde a tus exigencias, y salir a la calle a disfrutar de este deporte.
Iniciarse en el running no es complicado si tienes ganas y sabes cómo hacerlo. Deja a un lado las ganas de quedarte en el sofá. Una correcta alimentación, ropa y calzado adecuado o una rutina de entrenamiento personalizada serán, entre otros, algunas de las normas básicas para formarte como runner.
Como nuevo practicante de este deporte lo que más te importará al principio serán los resultados, pero si te precipitas fallarás en el intento. Los resultados cuando empiezas a correr tardarán en aparecer al menos un par de semanas, aunque no por eso quiere decir que no estés evolucionando. Nadie puede correr una carrera a los pocos días de haber empezado a entrenar, así que no te preocupes.
El gran “truco” para empezar a correr lo encontraremos en la constancia. No hay atajos. A diferencia de la mayoría de métodos milagrosos que puedes encontrar en la red, los consejos que veréis a continuación se centran en allanar el camino que convierta el correr en un hábito placentero, saludable y, sobre todo, duradero.
Qué hacer antes de empezar a correr
El primer consejo antes de empezar con una actividad física de cierta intensidad es acudir a profesionales de la salud y pasar el correspondiente chequeo médico.
Una valoración médico-deportiva es necesaria, sobre todo si eres mayor de 30 años, fumador o exfumador, sufres de alguna lesión, enfermedad, obesidad, etc.
Existen multitud de centros médicos especializados en reconocimientos médicos deportivos que realizan electrocardiograma, historia clínica, valoración cardiorespiratoria, antropométrica y ortopédica y prueba de esfuerzo básica.
Donde empezar a correr
Respecto a cómo y dónde correr, no hay límites, las posibilidades son infinitas. Carreteras, caminos, parques, pistas forestales, cintas de correr en gimnasios…Un buen consejo para principiantes es no alejarse en exceso del punto de partida o hacerlo con algo de dinero en efectivo por si tenemos que recurrir a otro tipo de transporte.
No hay limitación horaria, cualquier momento del día es adecuado. Depende de los gustos de cada uno y de la disponibilidad.
Si lo hacemos a primera hora de la mañana incrementamos la actividad del metabolismo basal durante las horas posteriores al ejercicio, estrategia óptima para perder peso, mientras que si nos ejercitamos a la tarde el estado fisiológico estará más regulado.
Busca tus ganas y tu motivación, cálzate las zapatillas y sal a disfrutar. Tu cuerpo te lo agradecerá.