Claves para adelgazar de manera inteligente

CONTROLAR EL HAMBRE DESDE EL PRINCIPIO DE LA DIETA.

Al comienzo de una dieta, a causa de la restricción de alimentos, el cuerpo comienza a segregar grelina, la hormona que induce la sensación de hambre. La tasa de esta hormona permanecerá más elevada durante todo el régimen, incluso hasta un año después del mismo, lo que se traduce en ganas constantes de comer y, como consecuencia, en ganar kilos. La sensación de hambre es una de las causas principales por las que se abandonan los regímenes.

FAVORECER EL METABOLISMO ENERGÉTICO DURANTE LA DIETA.

Como reacción a la restricción calórica, el cuerpo comienza a ralentizar sus actividad para limitar la pérdida energética. Dos síntomas de este estado: la debilidad y la fatiga. El cuerpo va a limitar las pérdidas de energía que cree accesorias por lo que, en reposo, quemará menos calorías y equilibrar las calorías ingeridas con las quemadas será cada vez más difícil. En esta etapa se hace indispensable favorecer el metabolismo con deporte, por ejemplo. Y será recomendable aportar al organismo complementos vitamínicos para ayudarle a vencer la fatiga consecuencia del régimen.

MANTENER LA MASA MUSCULAR TRAS LA DIETA.

Cuando estás realizando un régimen pierdes masa muscular de manera inevitable. El cuerpo disminuye su metabolismo de base y pasa a conseguir menos energía. El resultado es que después del régimen, el cuerpo acumula más grasa. Por lo tanto, resulta prioritario mantener la masa muscular para reequilibrar el metabolismo de base y reajustar la quema de energía.

Fuente: Ultimate